LA REACCIÓN QUÍMICA

Autora: Carlota de La Vega

Érase una vez un científico que lleva años de intentos mezclando productos químicos para crear un robot. Pero...

                                      PUMMM!!!!!

¿A que no sabéis que pasó…?

Había creado una criatura mágica. 
Pasaron semanas, meses y el científico no paraba a investigar… tres meses después no había descubierto nada pero sí que pensó que le tenía que poner un nombre  y la llamó HADA porque tenía dos alas como las mariposas, pero era más pequeña que un hada. Fue creando más y más y cada vez más. Pero…. 

Una noche que estaba muy cansado cogió el producto equivocado y creó otro ser mágico, pero esta vez era mucho más grande, tan grande, tan grande que no cabía en la casa y tuvo que irse a vivir a otro lugar. 

Dos años después, las hadas y el gigante se escaparon, las hadas se metieron en el agujero de un árbol y entre todas cavaron, cavaron y cavaron. 
Después de años trabajando crearon un mini pueblecito al que llamaron HADA LANDIA, mientras tanto, los gigantes crearon su propio mundo, su pueblo, dentro de un volcán . 
Cada vez había más hadas y gigantes. Las hadas concedían deseos y celebraban la primavera, el otoño, el verano… En cambio los gigantes por la noche, fastidiaban a los niños y a los adultos y... al último niño o niña que llegara a su casa, se lo comían hasta los huesos, las uñas, el pelo … 
Un día, la primera hada que fue creada,  se enteró de lo que  hacían los gigantes y fue a contárselo a la reina de las hadas y a preguntarle qué  podían hacer para que no pasara eso. La reina  hada le contestó que tenían que poner protección en todas las casas del pueblo, así que mandó poner el polvo de hadas más fuerte que hubiese. Las hadas hablaron con los padres y madres de todas las casas: les dijeron que no abrieran las ventanas, que no dejaran entornadas las puertas traseras y sobre todo, que no tuvieran MIEDO, porque si tienen miedo, los gigantes lo huelen y en cuanto lo detectan, se llevan al último niño o niña y a todos lo que estén atemorizados. 
A la mañana siguiente, en la noticias, salió que los gigantes se habían comido a tres niños porque habían tenido mucho, mucho miedo. Desde ese día las hadas mandan a un guerrero a cada casa de un niño para que no tengan miedo y puedan dormir tranquilos. 
Al día siguiente, las hadas por segunda vez se enteraron de que los gigantes esta vez no se habían comido a un niño, NOOO…… mucho peor se habían comido a una familia entera. 
Pasaron años, años y más años, los gigantes se iban poco a poco muriendo de hambre y las hadas, poco a poco fueron evolucionando. 
Después de dos  meses, las hadas se volvieron a encontrar con el científico y le contaron que todo  lo que había pasado lo habían realizado los gigantes que creó …. Estuvieron hablando un buen rato sobre eso y al final se les ocurrió que el científico inventara una linterna para que él se pudiera hacer más pequeño, como el tamaño de un hada más o menos y … así hizo. Lo inventó, y todos los lunes, miércoles y viernes, iba a visitarlas y cuando estaba delante del árbol cogía la linterna y se encogía, entraba en agujero y se metía en Hada Landia. Se lo pasaban tan bien, tan bien, que decidió quedarse a vivir allí con las hadas. 

Poco a poco, el científico se fue transformando en un hada y como ya está llegando la hora de despedirse, le coronaron rey. Se casó con la reina, tuvieron seis hijos. El primero en un futuro fue rey

                                                          FIN